Baúl de los recuerdos

Hoy recuerdo aquellas viejas puertas que se abrían y cerraban al salir, o entrar de «La Guarida», aquella estampa que creamos de cualquier película del viejo oeste, del que los almerienses podemos sentirnos tan orgullosos. Hoy recuerdo uno de los «popurrís» que guardo por aquí…

 

Diviso a lo lejos en el horizonte el humo de la locomotora

El sol ya se pone, se hace de noche se hace el silencio en el poblado

Y de repente se escuchan caballos ahora comienza la acción

comienza el duelo…

Duelo de bandidas almas desconocidas

Defiendo mi guarida en la arena

venganza prometida a una tierra perdida

Para mí no existe la compasión.

La guarida .. la guarida …

Mis balas no se gastan con cobardes

no me van los miserables

que no luchan por su honor.

La guarida, …. morada del cielo

La guarida, …. mi vida te entrego

La guarida donde tengo escondida

los tesoros de mi tierra

Donde guardo lo que yo más quiero

la guarida protege el secreto

La tierra que en mis noches a mi me hace suspirar

se muere poco a poco va perdiendo identidad

aguas cristalinas que se enturbian por los buitres carroñeros

que nos imponen con crudeza su verdad

Prisionera de tus playas veo caer

sueños que sin fe se difuminan

Cultura arraigadas de tierra y sal

se pierden por codicias de alimañas

Futuro negro le espera al obrero

es la ley del que maneja la del señor dinero

Esperanzas de generaciones

un incierto porvenir para el mas joven

Y dia a día sigues viendo injusticias

que maltratan y van pudriendo la existencia

No te sorprendes cada día en las noticias

sólo queda resistir ante el mañana

Y maldecir a los que roban

nuestros sueños y destruyen ilusiones

Para enfrentarte al que gobierna

al que impone su condena

al que miente en silencio

por su cobardía.

Contra el abuso de poder daré la cara

por un camino sin dolor ni fronteras

Contra corruptos que blanquean sin temor

Todo el dinero, sin esfuerzo y sin trabajo

Contra las armas de los dictadores

contra el que coarta nuestras libertades

por defender a la justicia con valor

A mí las injusticias no me valen…

Siempre que disparo contra tiranos motivos tengo

heridas profundas en mi guarida por tantos necios.

Porque sin cantarte to lo que siento estoy condenada

Por tantos cobardes que me traicionan sin dar la cara.

Leyes impone el tiempo no voy a acatarlas

Romperé las riendas abriendo caminos hacia mi morada.

Hereje o bandida siempre por febrero vuelvo yo a estas tablas.

No me escondo nunca yo siempre te doy la cara

y vivo mi vida sin temor a nada.

Esta condena es un mal sueño del que quieres despertar

es la agonía de su ira que maltrata hasta el final

como si fuera encadenando tu vida.

Aquel que te deniega con golpes tu dignidad

aquel que con la fuerza apresa a tu libertad

te encierra en una vida de martirios

y no hay quien te defienda…

Aquel que sólo piensa que eres de su propiedad

y no es más que un cobarde que no sabe qué es amar

y siempre se aprovecha de tus dudas y de que el miedo te ciega.

Despierta que la vida te espera

rompe ya las cadenas que te amarran y apresan.

Despierta que la vida te espera

nunca más seas la presa de aquel que no te quiera

La ciudad ya esta vestida con destellos de colores

y ahora estas forajidas poblaremos sus rincones

Entre la calle real la gente me retara a echar un duelo

con coplas de carnavales

Y en la Santa Catedral campanas suenan a compás

y entre el gentío van mezclándose disfraces

Ya se va acercando el día que mi corazón se enfrente

a la lucha preferida de cantarle a mi Almería

aunque la vida me cueste

Ya me voy pa la guarida a esconderme de la suerte

y me voy con la alegría que a ti mi tierra de mi vida

he sabido defenderte

Ya me voy pa la guarida a reunirme con mi gente

las cartas están repartidas

este juego se termina

y que dios reparta suerte

Y QUE DIOS REPARTA SUERTE.

Mis balas no se gastan con cobardes…